jueves, 10 de abril de 2008

Transiciones





Mirando hacia atras veo mis distintas evoluciones, desde la niña solitaria, independiente y antisocial que fui cuando recien comenzaba mi adolescencia, a la “chica punk” que jugaba a ser rebelde tratando de formar una apariencia, a eventualmente la rara, bohemia medio hippie, y finalmente a lo que me he ido formando ahora, no una apariencia y forma de actuar que encaje dentro de un grupo o estereotipo, mas una persona propia, no necesariamente perteneciente a ningun lado mas que a mi misma. Me ha costado llegar a este punto porque mis inseguridades en un pasado me llevaron a pedir prestada personalidades o elementos de algun caracter que estuviera cercano a mi, finalmente en mi soledad me veo autentica y sumamente determinada a entender quien es esta mujer y no dejarla ir, mas crecer con ella. Fui en una epoca lo que muchos llamarian una snob musical, de esas que considera que si lo que toca mis oidos no fue compuesto por genios contrarios a una cultura popular entonces no era digno de siquiera ser considerado. Mas a este punto de mi vida entendi que musica es musica, no me interesa tanto su composicion como su sentimiento, ya no se trata de generos y artistas mas si de lo que una cancion especifica me haga sentir. Ya no discrimino solo porque sale en la radio, o solo porque a todo el mundo le gusta (fui una vez llamada la peor fan del mundo porque en cuanto a mas gente le empezaba a gustar un artista que yo habia descubierto con anterioridad entonces empezaba a rechazarlo y lo dejaba de oir). Es nada mas un ejemplo de mi evolucion, lo que hace una año era capaz de rechazar meramente por pensamientos intelectualistas sin fundamento sentimental propio, es ahora una comunicacion que me llena. Me gusta mi ser ahora porque no se determina por nadie, no dependo de nada externo mas que de lo que yo misma pienso de mi, mis morales, mis virtudes, mis decisiones, mis gustos, no estan ligados al “que diran” o “que pensaran”, estan en mi, los determino yo de acuerdo a lo que he aprendido y madurado durante años. Curiosamente me veo confirmando aquello que dice “la gente no cambia” porque esta que soy ahora esta volviendo a sus raices, no en su totalidad pero talvez en esencia, de lo que fue una vez una peculiar persona de 15 años, solo que ahora mas madura, con mas conocimiento y celebrando quien soy en vez de cuestionandolo.

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